domingo, 6 de agosto de 2017

Pensando en cambios.






El otro día nos dieron la noticia de que posiblemente el trabajo donde estoy se acabe, aún no sabemos si nos reubicarán o simplemente nos dirán adiós. Lo cual me hace pensar en la fragilidad de los trabajos hoy en día.

En lo poco o mucho que llevo de vida me tocó conocer a personas que llevaban 10 o 15 años en su trabajo y no por que fueran excepcionalmente buenos en lo que hacían; simplemente el trabajo era tan estable que bien podrías pensar en jubilarte ahí sin ningún problema.

Lamentablemente ya no es así; son pocas las personas que pueden "casarse" con una compañía y envejecer en ella. No sé por que se de este fenómeno, tal vez las empresas ya se dieron cuenta que jubilar no es redituable o la economía está peor de lo que imaginamos.

Lo más horrendo acá, es que podría pensarse que uno estuvo al menos 2 años en el lugar, cuando no es así. Apenas el mes pasado cumplí 6 meses dentro de la empresa en el área donde estoy. Si bien es bueno que una empresa evolucione está cabrón que sea tan rápido y llevándose de encuentro a tanta gente. De 450 personas que éramos ya solo quedamos menos de 100 y los rumores que circulan mencionan que no llegaremos a final de mes.

Yo honestamente había pensado agarrar esta empresa para establecerme al menos 10 años y al parecer no va a ser posible.


Que lástima por ellos, que pena por mi.

Saludos.

viernes, 21 de julio de 2017

El nido vacio




Hace no mas de dos semanas mi hija se fue de vacaciones con mis papas. Ahorita deben de estar aterrizando en alguna playa a tomar el sol y tragar como posesos.

Nunca pensé que a lo largo de los años la falta de ella me hiciera tanto eco y daño, bien dice la
"leyenda urbana" que una vez que se es madre nunca más se vuelve a dormir a gusto o sin pendiente.

Sé que esta bien cuidada y protegida pero eso no quita el hecho de que la extrañe, sé que esto es el preambulo de su vida adulta, que cada año que pase gastará menos tiempo conmigo y no me incomoda, no pienso coartar su libertad pero eso no significa que no duela aunque sea un poquito.

Chaparra, te extraño.

jueves, 20 de julio de 2017

Visitas inesperadas.

Poca gente sabe que en la vida real no soy la persona mas sociable del mundo. De hecho por lo general soy del tipo de persona que llega a su casa, se encierra y al diablo el mundo. Me dedico a pasar tiempo con mi familia, ver series, leer y tejer.

Ayer estando en mi día de descanso me manda mensaje la que era mi jefa en el trabajo parte de los compañeros se habían quedado de ver para ir a jugar gotcha. Y me dice oye, te vamos a caer a tu casa en un rato mas a tomarnos unas cervezas. Honestamente mi primer impulso fue decirles no. Había dado un montón de vueltas muy temprano, había dormido poco y andaba modorra con calor y con un poco de mal humor.

Pero me puse a pensar que hace meses y meses que no me tomaba una cerveza o recibía a alguien en la casa, así que opte por acceder. Fue la mejor cosa que pude haber hecho, me pase una tarde tranquila, con una cerveza en la mano, riéndome como posesa y pasando un buen rato con gente que por lo general solo concibo verla dentro del trabajo.


La moraleja de todo esto es no cerrarse a convivir un poco con las personas, a veces es bueno salir de la zona de confort y reírte de la estupidez humana cuando ya se tienen un par de cervezas encima.

Saludos.